Melendi y la Revolución

Melendi es poco menos que Hitler para muchos listillos, modernos y artistas underground. Es un señor que suele caer mal a quienes viven ese moda juvenil (como la del botellón o la Kale Borroka) que es ser de izquierdas, quienes se indignan y enfadan sin pararse siquiera a escuchar un disco entero de Melendi. Y es que Melendi es lo que a todos esos pelacañas les gustaría ser: un viva la virgen con éxito.

Hace poco saco su tercer disco "Mientras no cueste trabajo", un cd muy entretenido de escuchar mientras fumamos, limpiamos la casa o trabajamos y que supone un gran paso adelante en la carrera musical de este señor tras el chasco que supuso su 2º disco. En el e-mule lo podeis bajar en un plis plas.

A Melendi le boicotean hasta su entrada en la Wikipedia. Y no deja de ser curioso, porque hay asuntos más preocupantes que las rastas de Melendi. En este país de envidiosos, jode ver triunfar a los demás mientras nosotros nos quedamos vanagloriándonos en nuestra minoria. Y que un señor viva de hacer lo que le gusta, cantándo a los canutos y a la alegría, vendiendo discos a porrillo, de farra todos los dias y firmando autógrafos en las tetas de las fans, es algo que fastidia, no nos vamos a engañar. Pero que a casi todos, incoherentes hasta la médula y detrás de nuestra fachada de mega-enrrollados, nos gustaría hacer.

Y es que cada cual tiene derecho a ganarse la vida como le salga del pijo, sin necesidad de posicionarse ideológicamente (teniendo en cuenta que en nuestra sociedad lo que manda es el dinero),y con derecho a llenarse los bolsillos, ya sea cantándole a los camellos o al cabezón de Fernando Alonso. Tener éxito está muy mal visto. Pero bueno, siempre queda más enrrollado hablar o defender a muerte a artistas minoritarios que no los conoce ni su padre, todo muy rockdelux, porque eso es ser underground:MUCHO EGO Y POCAS PESETAS.