Pues ya lo ha contado koko. Enero es el mes del proceso creativo en cretinolandia, de cómo llegar de la nada al todo, de mostrar cómo surgen nuestros cómics, de qué se parte, de cómo se redondea.
Quizá a alguien le sirva de algo ver qué metodología usan los otros autores. Quizá no. Pero en cualquier caso servirá para descubrir cuanto apunte, boceto y papel mojado hay detrás de la página definitiva de un cómic. Por supuesto estais invitados a colaborar.
Os voy a poner los apuntes que aparecieron el otro día en una carpeta, relacionados con el episodio 4 de la serie de los Vallekurros, Marruecos Trip, publicado en Tmeo.
Cuando me planteé realizar la serie, quería que todos los episodios fueran autoconclusivos pero que cada uno empezara donde terminaba el otro, sin dejar grandes lapsos temporales entre medias para dar una sensación de continuidad a la serie e intentar contar absolutamente todo lo que les pasaba a los vallekurros en Marruecos.
Tenía claro la mayoría de anécdotas que iban a vivir desde que salían de vallecas hasta que volvían, pero me faltaba rellenar un episodio que, a mi juicio, me parecía importante. El paso del estrecho.
Iban a cruzar en Ferry pero no tenía ninguna idea que fuese lo suficientemente graciosa como para merecer ser contada. Y lo jodido es que ya había comenzado con la serie y se acercaba ese episodio.
Finalmente usé una vieja idea que tenía en el baúl sobre la tontería de no echar gaseosa a los buenos vinos, lo adapté para el calimocho y luego me vino, como una inspiración, la posibilidad de que al aparcar el coche en el ferry se les olvidara echar el freno de mano y armaran un estropicio. Posibilidad que es harto improbable ya que los coches van bien pegados unos a otros. Pero eso me daba igual. El resto vino solo.
Yo suelo trabajar con un guión o una sinopsis de lo que voy a dibujar. Intento tener siempre cerca un cuaderno de notas pero, a veces, cualquier papelajo que tenga a mano cuando me llega la inspiración me sirve. Como en este caso en que me pilló trabajando en un almacén y arranqué un papel que rotulaba una caja.En un principio intenté organizar el cómic en 3 páginas pero como el número de acciones me salió muy elevado y con ello el número de viñetas, finalmente pasé a 4 páginas.
Con el guión escrito, o bien paso directamente a estructurar la página o si la historieta es larga, como es el caso, primero aboceto las viñetas sin organizarlas en la página. Tomando apuntes y organizando los diálogos, etc.
Y cuando ya tengo claro el número de viñetas que voy a necesitar, determino el número total de páginas y estructuro las viñetas siguiendo el método de Von Danpherdoff. Nunca falla.
El resultado final fue este:
3 comentarios:
me moooola, ver como se lo currran los demás!!
Mejor que Will Eisner!
Eliminar los fondos ahorra mucho trabajo.
Publicar un comentario