Entre risas, polvo, cervezas y fresquito serrano me sorprendieron los Barrio Tomillo, con una puesta en escena estrafalaria pero con gusto y elegancia, una mezcla entre los grupos de Roger y los Mamá Ladilla primera época, desparrramaos, un poquito de la olla, pero tocando bien y divirtiendo al personal de lo lindo, un grupo de los que se divierten tocando y alegran la noche a la peñita que a los cinco minutos ya coreaba sus estribillos atómicos y bailaba la conga, el cucu y la yenka. Fueron a sustituir a los Fritanga y resultaron los más guapos de la fiesta.
Tal que así tocaron pero al descubierto y con un vientecillo refresca pantorrillas.
Y por la barra encontré un taquito de fanzines, el Creatura, de una peña de Illescas, tierra famosa por su dinamismo cultural, estos tipos son escritores, músicos, dibujantes, gente que supongo que no pasa las mañanas de domingo rezándole a San Fernando Alonso, pero mejor que que os lo cuente yo, os meteis en su blog y se lo preguntáis a ellos.
Tal que así tocaron pero al descubierto y con un vientecillo refresca pantorrillas.
Y por la barra encontré un taquito de fanzines, el Creatura, de una peña de Illescas, tierra famosa por su dinamismo cultural, estos tipos son escritores, músicos, dibujantes, gente que supongo que no pasa las mañanas de domingo rezándole a San Fernando Alonso, pero mejor que que os lo cuente yo, os meteis en su blog y se lo preguntáis a ellos.
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